miércoles, 14 de abril de 2010

EN BLANCO

Una parada, un lapsus
que sublima la coherencia
de la ausencia de tiempo.

Un punto y aparte
un paréntesis en el espacio
e inabarcable en el vacío.

Ese instante que petrifica
divina nada
que me inmoviliza.

2 comentarios:

  1. Hay instantes extraños, como fogonazos de luz, o de ausencia de luz, como de estar fundidos con el todo o la nada, desde luego por encima del tiempo y sus limitaciones, en los que tienes una conciencia clarísima de las cosas...pero suelen ser instantes muy breves.
    Me ha encantado cómo lo has descrito, aunque puede ser que no te refieras a algo así en absoluto, o sí.
    Ya sabes una cosa es lo que siente el autor, otra lo que le sugiere al lector.

    Un abrazo.

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  2. La analogía planteada usando los signos gramaticales me ha subyugado!

    Otro abrazo...

    SIL

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